25 agosto 2009

REFLEXIONES SOBRE COMUNICACIÓN Y PODER

Nolasco Morán Pérez

El siguiente ensayo sobre "Reflexiones sobre comunicación y poder", fue publicado con el título de "¿Comunicación o control?" el 19 de agosto de 2009, en la presentación de la revista número 1 de "aprehender", organo de difusión del Consejo Municipal de Ciencia y Tecnología del Municipio de Oaxaca de Juárez, Oaxaca.

La pretensión de este escrito es reflexionar sobre el significado de la comunicación y el poder, la toma de decisiones y los efectos que estos procesos tienen en el individuo y entre las relaciones que los sujetos van construyendo cotidianamente en los respectivos sistemas en que se encuentran. Aquí se explica y reflexiona sobre el modelo vertical del proceso de comunicación que se liga con un enfoque conductista y que se relaciona con un ejercicio enajenador del poder a través de la centralización de las decisiones y sus efectos en el sistema y sus protagonistas.

¿Qué es comunicación? Hay tantas respuestas a esta pregunta como actitudes y conductas que puede asumir el ser humano ante el mundo social, natural y ante si mismo. Desde el enfoque conductista, la comunicación se puede entender como el conjunto de procedimientos mediante los cuales una mente puede afectar a otra. (Borden y Stone 1982: 73). El conjunto de procedimientos implica el manejo de información, mensajes, estímulos, decisiones acciones y reacciones que se dan entre los sujetos interactuantes involucrados en el proceso comunicativo para afectarse e influirse mutuamente consciente o inconscientemente. El concepto de poder que se encuentra ligado con esta definición de comunicación manejado por Amigot citando a Foucoult (2005:120) se refiere al “… conjunto de acciones sobre acciones posibles: opera sobre el campo de posibilidad en el que se inscribe el comportamiento de los sujetos que actúan…: incita, induce, detiene, facilita, o dificulta, amplía o limita, hace que algo sea mas o menos probable; en el limite, restringe o impide absolutamente” Dennis H. Wrong, (1995:2) citado por Vesna Terselic, lo define como “la capacidad de una persona para producir determinados efectos, buscados o previstos, en otras personas".

El poder es potencial y relativamente pasivo en la medida que esta ahí presente en el sujeto para ejercerse, y es acción cuando se expresa en las decisiones que toma el sujeto para afectarse a sí mismo u a otros. Parece obvio que para ejercer el poder desde el sentido de persuadir, convencer, manejar y dirigir para producir determinados efectos previstos, es necesaria la comunicación, sin ella es imposible el ejercicio del poder sobre los demás. Para quienes implícita o explícitamente asumen estas concepciones desde una posición comunicacional conductista del ejercicio del poder, favorecidos por las posiciones que ocupan en las estructuras objetivas (sociales, institucionales, organizativas, educativas, etc), y que legitiman estas formas de comunicarse y ejercitar el poder con la aceptación de los sujetos subordinados, tienen privilegios para tomar decisiones sobre los demás, “los demás”, en este caso solo juegan el papel de subordinados que deben de asumir su papel de “escuchas” ante quien ejerce el poder de una manera conductual y centralista, donde las decisiones no deben ser puestas en duda, mucho menos cuestionadas o criticadas, porque esto es un claro signo de “insubordinación” y de atentado al orden establecido, y quien atenta al orden establecido dentro del sistema, es castigado o acallado mediante medidas represivas, ignorado o sacado fuera de dicho sistema por distintos medios legales e ilegales. El “escucha” o subordinado debe aprender a callar, a no pensar, a no expresar libremente sus opiniones, y sí ser un ejecutor eficiente de lo ya decidido, un buen “hacedor de tareas”, eficiente, disciplinado, organizado y generador de productos que deben ser necesarios para mantener el sistema, no para cambiarlo, no para mejorarlo porque esto último atentaría fundamentalmente a las formas de comunicación y ejercicio del poder, y a las maneras de tomar decisiones que ya han sido establecidas implícitamente para que el sistema se mantenga. El “Copela o cuello” en este sistema de comunicación conductual implica premios o castigos y el ejercicio centralista del poder implica la subordinación y adaptación a las autoridades jerárquicas y la aceptación de las decisiones, acciones y tareas prefijadas desde el nivel mas alto de autoridad, a los niveles intermedios y bajos. Se puede inferir la conducta del que ejerce el poder de manera centralista en las características siguientes: Actitud obsesiva por el control de las conductas de sus suobordinados, poniendo especial cuidado en aquellas conductas que puedan implicar indisciplinas, desacuerdos y no cumplimiento con las tareas fijadas, emitir opiniones que contravengan lo ya decidido, excesivos controles no sobre la calidad de lo que se hace, sino de cuanto se hace, excesivo control de los subordinados y no sobre los procesos y resultados de los trabajos, hay una atención mas en las formas que en los fondos de lo que se hace. Hacen como que “escuchan”, pero solo se están escuchando así mismos. Piensan que cuidan los intereses institucionales o de la organización, lo cual lo hacen a medias, debido a que sus percepciones personales están cargadas de subjetividad, porque no tienen una visión consciente, global y profunda de cómo se está moviendo el sistema, o su conocimiento es fragmentado y desarticulado, lo que no les permite visualizar la importancia real del recurso humano como componente fundamental de dicho sistema. El recurso humano es desechable cuando se considera que afecta o no es útil para la preservación del sistema. Con respecto a las conductas de los “subordinados”, sobre los cuales se ejerce la comunicación conductista y el poder de las decisiones centralistas, se pueden notar las características siguientes: Aprenden a “escuchar” a estar “atentos” a los comunicados y decisiones de quien detenta el poder de una manera centralista, aprenden a guardar un “respetuoso silencio” cuando el detentador del poder y de las decisiones “habla”, se autolimitan en su poder de reflexionar y pensar por si mismos porque consideran consciente o inconscientemente que esto no tiene sentido “dentro del sistema en que se encuentran”, cuestionarse, preguntarse y proponer es un asunto muy delicado y riesgoso. “Escuchar”, “atender”, “asumir” y actuar en consecuencia a los comunicados y a las decisiones tomadas de manera centralista es lo mas “sano”.
Obviamente que el subordinador (dueño del poder y las decisiones) y los subordinados (los escuchas de los comunicados y ejecutores de las decisiones) a la larga padecerán de ciertas patologías sicosomáticas que se verán reflejados en altos niveles de estrés, frustraciones, malestares estomacales como gastritis, colitis etc., reflejo de la ansiedad de un control obsesivo de sí mismo y de los demás, relaciones familiares y laborales poco favorables para el crecimiento individual, familiar e institucional, insomnios, ansiedad y sobre todo una gran vaciedad y perdida del significado de la vida, y en consecuencia una gran infelicidad que los logros materiales solo atenúan pero no resuelven. Viviendo bajo este clima enrarecido de relaciones enajenantes donde existen pocos enajenadores y varios enajenados, todo parece “normal”, y los mas importante es parecer ante los ojos de los demás como “normal”, el clima de enajenación coarta la libertad del ser humano para ser el mismo, para desarrollar sus potencialidades y cultivar sus facultades espirituales, intelectuales, afectivas y físicas de una manera armónica, justa y equilibrada. Enajenador y enajenado desarrollan un círculo invisible de autodestrucción sutil, de vicios –que se dificulta ser vistos desde adentro del sistema- que pueden llevar al colapso tanto de los sujetos como del sistema mismo en el mediano y largo plazo. La comunicación conductista centralista y enajenante, es un modo vertical de ejercer comunicados y decisiones sobre los demás, donde los “demás” se acomodan, se amoldan y sobreviven ejerciendo su capacidad plástica de acomodamiento, porque de otro modo pueden pasar a la calidad de “desechables”, como las bolsas y envases plásticos que se utilizan, se desechan y degradan nuestro entorno natural, para el caso de enajenadores y enajenados, estos en algún grado y modo construyen un entorno social, laboral y familiar no muy saludable. Es pertinente aclarar que los sistemas sean estos políticos, económicos, familiares, educativos, empresariales o de cualquier tipo, se mueven, son dinámicos y dialécticos en el sentido de que prevalecen en dichos sistemas una serie de contradicciones que los impulsan a transformarse, a cambiar y que dichos cambios pueden ser con la finalidad de mejorar positivamente o bien para esclerotizarse, es decir para mantenerse petrificados, rígidos e inelásticos, lo que se expresa en su escasa capacidad de adaptación al entorno reinante, en su inestabilidad y fragmentación interna ante los conflictos internos y los embates del exterior. Bajo este modelo de comunicar y ejercer el poder, es obvio que hay una pérdida enorme de las capacidades de los individuos, al limitarse su capacidad de reflexión, de participación y de decisión para transformarse a si mismos y al sistema en que se mueven. Cada sujeto es un ser potencial lleno de creatividad, de entusiasmo, de entrega, de ideas innovadoras, de facultades afectivas, intelectuales, espirituales y físicas que son desaprovechadas, por actitudes y conductas que se vuelven rígidas, inflexibles e inadecuadas para un cambio positivo.

Falta comentar como idea final, que así como uno o más sujetos ejercen un poder enajenador sobre muchos sujetos, un grupo de sujetos o muchos sujetos pueden ejercer un poder enajenador sobre un individuo, coartándole su poder de creatividad y de acción, cuando estas –acciones y creatividad- atentan en contra del sistema establecido al cual el grupo se ha acomodado.

FUENTES CITADAS
Amigot Leache P. 2005. Relaciones de poder, espacio subjetivo y practicas de libertad: análisis genealógico de un proceso de transformación de género. Tesis doctoral. Universidad Autónoma de Barcelona, Departamento de Psicología, Facultad de Psicología. 541 pp. Barcelona, España Descargada de http://www.4shared.com/file/16170093/cf375297/36787.html?cau2=403tNull 29 de noviembre de 2007

Borden G. A. y Stone J. D. 1982. La comunicación humana: el proceso de interrelación. Editorial “El Ateneo”. Buenos Aires, Argentina. 274 pp.Orissa conference on Nonviolence and Social Empowermen., Vesna Terselic (traducido por Alfonso Herranz) 2001. http://www.wri-irg.org/nonviolence/nvse01-es.htm#Wrong,_Dennis_H#Wrong,_Dennis_H accesado el día 4 de agosto de 2006

20 agosto 2009

Presentación de la revista “aprehender “

BOLETIN INFORMATIVO No. 4
FECHA: 20 de agosto de 2009
Redactó: Nolasco Morán Pérez
mesoamerica10@yahoo.com.mx


El miércoles 19 de agosto del presente año, en el salón de expresidentes del edifico del Municipio de Oaxaca, se realizó la presentación del primer número de la Revista “aprehender”. En dicho lugar se dieron cita tanto autoridades municipales como directivos y representantes de las instituciones académicas y de investigación que colaboran con la revista.

Cabe resaltar que la participación de la Universidad Mesoamericana en este esfuerzo de divulgación de la ciencia, la educación, el arte y la cultura a través de esta revista se enfoca a colaborar en el Consejo Editorial responsabilidad que recae en la Lic. Martha Chandomid Salud directora del plantel Oaxaca , así como en los integrantes del Grupo Emergente de Investigación de la Universidad Mesoamericana (GEIUMA), que colaboran con sus artículos y textos que conforman los contenidos de este órgano de difusión municipal.

En la presentación de la revista, la Ing. Mayra Vargas López, Directora de Difusión y Promoción de la Ciencia y Artes del Municipio de Oaxaca de Juárez y Presidenta del Consejo Municipal de Ciencia y Tecnología de Oaxaca de Juárez (COMUCyT), se encargó de dar la bienvenida a los asistentes a esta presentación. Habló sobre la finalidad de la publicación y agradeció al presidente municipal Lic. José Antonio Hernández Fraguas, a las instituciones académicas y de investigación la colaboración que están haciendo para que la revista “aprehender” sea hoy un logro colectivo de personas e instituciones que se ve concretizado en este primer número.

El Lic. Marcial Ocampo Ojeda, Director de Sistemas Coordinados de la Comisión Estatal de Planeación de la Educación Superior (COEPES) y Secretario Ejecutivo del COMUCyT se encargo de precisar el formato y contenido de la revista así como resumir los temas y artículos que se presentan en este primer número.

Finalmente el Lic. José Antonio Hernández Fraguas, Presidente del Municipio de Oaxaca de Juárez, se encargo de resaltar la importancia de esta revista diciendo “ No es un esfuerzo más del gobierno municipal… es una responsabilidad que se adquiere en esta época de crisis, en la cual es necesario no sacrificar este tipo de proyectos que son prioritarios… la presentación de esta revista son buenas noticias en medio de un mundo complicado en lo financiero y económico… por lo que se hace extensivo un agradecimiento a los integrantes del Consejo Editorial, del COMUCyT y de los investigadores y académicos que están colaborando en este primer número y en los subsiguientes, así como una felicitación por tener un nuevo espacio para difundir la ciencia, la tecnología, le educación y las artes”

Finalmente es importante mencionar que en este primer número de la revista el GEIUMA colaboró con un texto titulado “¿Comunicación o control?”. Esta revista es producto del esfuerzo colectivo tanto de instituciones gubernamentales, como educativas y de investigación, por lo que es encomiable y estimulante seguir con el mismo, sin perder de vista que dicha revista debe hacerse llegar y cumplir con su cometido de informar y formar una nueva conciencia social, cultural y científica en sus lectores.

19 agosto 2009

¡Nos Vamos al VIII Congreso Internacional de Historia Oral: “La Historia Oral y la multidisciplinariedad: retos y perspectivas”!



BOLETIN INFORMATIVO No. 3
FECHA: 19 DE AGOSTO DE 2009
Redactó: Nolasco Morán Pérez
mesoamerica10@yahoo.com.mx


Los días 9, 10 y 11 de septiembre, los integrantes del Grupo Emergente de Investigación de la Universidad Mesoamericana (GEIUMA), participaremos en el VIII Congreso Internacional de Historia Oral: “La Historia Oral y la multidisciplinariedad: retos y perspectivas” que se realizará en la Universidad de Colima, bajo la coordinación de la Dra. Karla Y. Covarrubias Cuellar. La importancia de este Congreso estriba en que será un espacio donde se compartirá información y experiencias en torno a los estudios que han realizado investigadores nacionales e internacionales, aplicando el enfoque cualitativo interpretativo enmarcado en la historia oral y de familia.
Los trabajos que se presentarán en el mencionado Congreso por parte de los integrantes del GEIUMA serán:

Mesa 11: Historia Oral y familia
Ponente: Ignacio Díaz Gisela Josefina
Ponencia: Metodología para la construcción de historias de familia: una perspectiva para reconstruir las transformaciones culturales en el campo educativo en Oaxaca

Mesa 11: Historia Oral y familia
Ponente: Morán Pérez Nolasco
Ponencia: Perfil sociocultural de una familia oaxaqueña de curtidores a lo largo de cuatro generaciones

MESA 19: Historia Oral e historias de vida
Ponente: Andrés Ortiz Rafaela
Ponencia: Historia de vida de una mujer oaxaqueña.

MESA 27: Historia Oral y trabajo
Ponente: Guevara Cruz Horacio
Ponencia: La apropiación de las TIC en los profesores universitarios. Estudio de caso a través de la historia de vida.

Por este medio les mantendremos informados de esta y otras actividades que se están programando, y donde los integrantes del GEIUMA participarán activamente. En su momento daremos a conocer los resultados de dichas actividades.

11 agosto 2009

Consideraciones sobre la investigación cualitativa y la etnografía.

Consideraciones sobre la investigación cualitativa y la etnografía.
Por Jorge Galván.


Uno de los debates más prolongados dentro del campo de la investigación científica radica en la pugna que algunos investigadores encuentran entre el método cuantitativo y el cualitativo. Al parecer el campo de lo social encuentra muchas posibilidades explicativas dentro del ámbito de lo cualitativo, sin embargo, el rigor de este método ha sido cuestionado por la tradición positivista. Es cierto que para entender lo fértil que puede resultar el método cualitativo -de vínculo indisoluble con la interpretación- es necesario ampliar nuestro concepto de ciencia, llevarla del campo de lo puramente descriptivo al de lo explicativo. Así, desde esta perspectiva, podemos afirmar la posibilidad de encontrar algo sólido, con sentido, en lo social. El comportamiento dentro de una sociedad no es aislado o casual, es el resultado de múltiples eventos que se asientan en la memoria colectiva.

Autores como Hernández Sampieri afirman que el proceso dentro de la investigación cualitativa no es lineal ni se puede hablar de una secuencia lógica como en la investigación de carácter cuantitativo. Las etapas dentro de la investigación cualitativa tienen como función responder a las preguntas de estudio lo que hace que puedan ser recurrentes. No existe dentro del proceso un momento claro en donde se pueda determinar que se ha finalizado una etapa y que es el momento indicado para pasar a otra. En el momento en que el investigador se incorpora en el escenario y observa se puede considerar que ya está recolectando y analizando datos. Es por esto que los avances se van ajustando continuamente, por lo que la recolección y el análisis son actividades casi simultáneas. Dentro de la investigación cualitativa "se recogen datos -en la muestra inicial- de una unidad de análisis o caso y se analizan, simultáneamente se evalúa si la unidad es apropiada de acuerdo con el planteamiento del problema inicial y la definición de la muestra inicial. Se recolectan datos de una segunda unidad y se analizan...y así sucesivamente". (Sampieri 2006). Con esto, podemos notar como el proceso dentro de la investigación cualitativa tiene una flexibilidad que le permite irse acoplando a lo que dé más sentido dentro de la interpretación del fenómeno que se estudia. El enfoque cualitativo, comprometido con la interpretación y la claridad del sentido, prefiere indagar sobre el mundo del sujeto que sobre el fenómeno en sí, pero esto le demanda observar con habilidad para poder encontrar las relaciones entre los elementos que forman parte del escenario al que entra. Por esto la observación es un elemento fundamental dentro de la investigación cualitativa: "La observación puede realizarse dentro del grupo que se investiga como parte activa en él. De ser así, el investigador debe imitar las reglas, expresas e implícitas, que el grupo que observa tiene. Esto lo lleva a participar con la disposición que los otros muestran." (Rojas, 1998)

La observación participante permite adentrarse en las tareas cotidianas que los individuos realizan; conocer más de cerca las expectativas de la gente -lo que ayudará entender los motivos para actuar- sus actitudes y conductas ante estímulos específicos y hasta su forma de solucionar problemas. Esto hace que la observación participante sea una de las más importantes dentro de las investigaciones de carácter social. Se pretende que al integrarse a las actividades de forma cotidiana las relaciones que se establecen entre los elementos, físicos o no, dentro del grupo sean cada vez más claras. La constancia que implica este tipo de observación ayuda a que se hagan evidentes cosas que a primera vista no pueden ser captadas. De este modo, podemos ver la importancia fundamental de la técnica de observación, ya sea ordinaria o participante, pues las dos permiten enriquecer momentos específicos de la investigación sin generar oposición de algún tipo. En el caso de la observación ordinaria podemos encontrar muchos elementos para dirigir o plantear la investigación. Mientras que en la observación participante encontramos el sentido de la acción social: “la etnografía en términos de descubrir y describir las acciones de los participantes dentro de su interacción social contextualizada, en el sentido y significado que dan los mismos participantes a sus acciones.” (Gutierrez, J. 1999)

Con esta “codificación” podemos inferir que el significado en cada persona se deriva o surge de su interacción social. Y que los significados se manejan y modifican según el proceso de interpretación de las personas. Si la Etnografía asume que las acciones sociales se producen en los participantes según su forma de percibir, entender, interpretar, juzgar y organizar su mundo, para investigar sobre las acciones sociales no hay una vía más propicia que la de preguntar directamente a los participantes por qué actúan de determinada manera. Esto quiere decir que el investigador escudriña por qué las personas actúan tal como lo hacen y a qué significados obedecen. En la Etnografía, entonces, se asume la relevancia del papel del actor y se insiste en comprender las acciones sociales desde la perspectiva del propio actor. Por todo esto, podemos afirmar que utilizar el método etnográfico es tener presente aspectos explícitos e implícitos, manifiestos y ocultos, objetivos y subjetivos, si es que no se pierde de vista que se habla de una “construcción” –o reconstrucción- del conocimiento social.



Referencias Bibliográficas.
  • Rojas, R. (1998) Guía para realizar investigaciones sociales (32a. ed.) México. P y Va
  • Sampieri, R., Fernández, C., Baptista, P. (2006) Metodología de la Investigación. (4a. ed.) México. Mc Graw Hill.
  • Delgado, J., Gutiérrez, J. (1999) Métodos y técnicas cualiativas de investigación en ciencias sociales (3a ed.). Madrid. Síntesis Ed.